White Hart Lane se mantiene inexpugnable, gracias a un Tottenham que realizó una presentación perfecta frente a los temerosos Cherries de Eddie Howe. En el horizonte, se avista el clímax de la presente temporada: El desenlace de la lucha por los títulos de Premier League y FA Cup frente a un rival común, el Chelsea de Antonio Conte.
Premier League
Jornada 32
White Hart Lane, Londres. 12:30 GMT
TOTTENHAM (4): Lloris (c); Walker, Alderweireld, Vertonghen, Davies; Dier, Dembele; Eriksen (87' Janssen), Alli (84' Sissoko), Son; Kane (79' Wanyama).
Subs: Lopez, Trippier, Onomah, Wimmer.
DT: Mauricio Pochettino
BOURNEMOUTH (0): Boruc; Smith, Francis (c), S. Cook, Daniels; Stanislas (69' Fraser), Arter, Wilshere (56' L. Cook), Pugh; King, Afobe (77' Mousset).
Subs: Allsop, Gradel, Mings, Cargill.
DT: Eddie Howe
Arbitro: Michael Oliver
Goles: 1-0 16' Moussa Dembele; 2-0 19' Heung-Min Son, 3-0 48' Harry Kane; 4-0 92' Vincent Janssen.
Expulsados: -
Amonestados: Tottenham: - / Bournemouth: Fraser.
Incidencias: -
Tottenham salió a la cancha de White Hart Lane buscando mantener la presión frente al líder Chelsea, manteniéndose fiel a la formula utilizada en las recientes semanas: Línea de 4 en la zaga con Dier equilibrando al equipo, delante del polivalente joven inglés los mismos de siempre, Kane y compañía buscando sumar otras tres unidades. Y desde el primer momento se vislumbró que la película sería la misma de las últimas semanas, con los Spurs machacando a su rival por todos los flancos en ataque, mientras que al momento de defender los blancos se transforman en lobos salvajes buscando recuperar lo más rápido el balón de los pies del rival de turno. En el minuto 16, Moussa Dembele abrió el marcador tras un tiro de esquina de Eriksen muy mal defendido por la zaga roja, y sin ser suficiente esto, Heung-Min Son amplió las cifras en el minuto 19, fruto de la incesante presión de Eric Dier sobre la salida de los visitantes. Tras recibir las dos estocadas iniciales, los de Howe no respondieron a la altura del coloso londinense y sólo se limitó a encontrar respuestas en las botas de Jack Wilshere y en la lucha de Joshua King, pero la cohesión de una zaga trabajada es una de las claves del invicto de la fortaleza de Haringey. En el arco de Boruc, caía ocasión tras ocasión, con un Kane pivoteando y entregando balones a Eriksen, Son y Dembele, los cuales encontraron una correcta resistencia del golero polaco para finalizar la primera parte con una ventaja de dos tantos por cero.
En el complemento, los de Pochettino continuaron con la excelente presentación de la mitad inicial y la tercera cifra llegó a los 2 minutos de iniciadas las acciones, gracias a una hermosa jugada asociada entre Eriksen y Alli, la cual finalizó Kane mareando a Francis, consiguiendo así su vigésimo gol en lo que va de torneo y siendo la tercera temporada consecutiva en la cual alcanza esta marca. En los minutos siguientes prosiguió la avalancha blanca sobre el arco de Boruc mediante numerosos remates de Kane, un magnifico Eriksen que tomó la manija del equipo, Sonny malogrando chances y hasta Davies se daba la maña de golpear a puerta. Por otra parte, la festejada lesión de Wilshere obligó a Harry Arter tomar la posta en la conducción del equipo sureño, apoyado en las carreras de Stanislas, aunque unos impecables Alderweireld, Vertonghen y Dier cerraron la cortina para que Lloris sólo fuera un espectador sobre el césped. Acercándose el final del encuentro, Pochettino dio entrada a Wanyama, Sissoko y Janssen buscando reservar energías para la semifinal de copa de la semana venidera. Y el delantero holandés aprovechó los pocos minutos alcanzando la cuarta cifra final, y su primer gol de juego abierto en liga.
Con este resultado, Tottenham alcanzó las 71 unidades con esta victoria y, lo más relevante, recortó a cuatro unidades su diferencia respecto al líder Chelsea, que sufrió una dolorosa derrota como forastero por 2-0 frente al Manchester United de José Mourinho en la jornada dominical.
El próximo partido de los Lilywhite será la semifinal de la Copa de Inglaterra frente a los Blues de Antonio Conte el sábado 22 en la cancha grande y terrible, Wembley.
Hoy se ha ampliado la pequeña brecha de esperanza, el fixture y los puntos favorecen a los del oeste de Londres, pero lo mostrado en los últimos fechas muestra que los del norte londinense están 'on fire'. Restan 6 fechas y 18 unidades que pueden finalizar con una sequía de más de 60 años o habrá que esperar otra temporada más, como siempre decimos los hinchas Spurs año tras año, pero Pochettino ha transformado y elevado las expectativas de la Yid Army.
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